Hermanas, amigas, compañeras!

"El dormir juntos no abre otra cosa que la posibilidad de penetrar en lo más íntimo del otro, a saber, justamente en su sueño. El sueño dichoso y lánguido de los amantes que se hunden juntos en él prolonga su espasmo amoroso en un largo suspenso en un punto culminante mantenido hasta los límites de la disolución y la desaparición de su propio acuerdo: mezclados, sus cuerpos se desenredan indisiosamente, por muy entrelazados que puedan permanecer en ocasiones hasta el final de dormir, hasta el momento en que re-descubran la alegría como si hubiera sido renovada a causa de su olvido, eclipsado el tiempo de su sueño, y en que sus cuerpos ágiles vuelvan a la superficie luego de haberse sumergido en el fondo de las aguas por ellos mismos derramadas." Jean-Luc Nancy   

Los amantes duermen para saber que tienen otro día juntos, otro día más, solo suyo..

Primeros días: Capilla del Monte
Últimos días: San Marcos Sierras 

En las primeras charlas se hablaba de este viaje, pero no se pensaba que iba a llegar, y menos poder compartirlo.
Horas de viaje en micro, risas y sueño. 
Llegar y no saber dónde estábamos y preguntar. 
Armar la carpa, hacer la comida a base de arroz y atún y alguna que otra verdura. 
El viento moviendo la carpa y yo pensando que nos íbamos a volar. 
El río, el hermoso río! Tan transparente y frío que te refrescaba después de haber caminado, escalado, saltado para llegar hasta ahí. 
No tener en todo el día luz, no estar pendiente del celular o de una computadora. 
Poder ver el cielo totalmente estrellado y disfrutar de la luna llena en su máximo esplendor y poder dormir abajo de ella. 
La compañía, primero y principal del Chino, el amor, la dulzura, la risa, que me hacía no extrañar casa. 
La gente linda de pueblo o de otros lugares o países diciendo: "es lo más relajante que conocí hasta ahora y no me quiero ir" o "dejé todo, vine acá, conseguí laburo y me quedo acá". 
Esas cosas que te llenan y que hoy, quiera o no, cambió cosas en mí. 
Que haya sido un comienzo y que se vengan más viajes. 

Un desayuno, cigarro y libro de Cortázar..

Un pasado, ese momento que se hizo eterno, que por más que no siga en el presente por momentos late. 

Palabras que no se dijeron y que se fueron las ganas de decirlas. 

Pero no me olvido todo lo que me hizo sentir, aunque haya acabado todo.