Quisiera ser la tierra sosteniéndote, la seda que toca tu piel, quisiera ser el agua que calma tu sed. Quiera ser el sol iluminándotela brisa del otoño el tiempo que no pasa cuando estoy mirándote. Siento el frío de la noche dentro de mi alma sólo el roce de tus labios me traería la calma. Soy un náufrago en un mar de puro sentimiento tus ojos son las estrellas que me guiarán a puerto.